Mi ilusión es seguir, pero si es que no, tampoco pasa nada.
El Pedal de Frodo., Frodo y Rafa Simon, 11 Januari 2014
La sombra de la injusticia puede ser muy alargada. Puede privar de luz a muchos corredores. Esta vez ha arremetido contra nueve años dando el máximo en cada carretera, en cada prueba, por cada líder. Haimar, Samuel, Mayo, Antón…jefes de fila de color naranja que nunca tuvieron queja alguna de su esfuerzo, de su entrega por ellos. Tampoco la tuvo el espectador, testigo de sus mil y una fugas en el Tour, la prueba que le dio todo, o en la Vuelta, la que le enamoró. Nueve años de naranja en los que al menos pudo levantar las manos una vez, en la Bayern Rundfahrt. Allí se invirtió todo. Su rol en carrera cambió, dejó de ser gregario por un día. Sin embargo, la injusticia no entiende de reconocimientos, ni de recuerdos. Sus 32 años no ayudarán tampoco si es que un último esfuerzo por parte de algún equipo no lo remedia. Pero ocurra lo que ocurra, Rubén Pérez podrá permanecer con la cabeza bien alta: siempre estuvo ahí. Bajo la sombra del trabajo bien hecho.
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